Se hizo cargo de la empresa de escobas y aspiradoras a la que da nombre cuando su marido falleció. Su eficaz gestión le convirtió en visionaria.
Aunque en la actualidad no son muchas las mujeres que ocupan el cargo de CEO en grandes compañías, paradójicamente fue en el siglo XIX cuando Anna Bissell inició el camino. En la sociedad de aquel entonces, las tareas del hogar estaban designadas a las mujeres, aunque en el caso del negocio y la historia que rodea a la protagonista se puede decir aquello de que la excepción confirma la regla.
Y es que Anna Bissell llevaba junto a su marido, Melville, las riendas de la empresa de escobas y aspiradoras que en la actualidad lleva su nombre. Su esposo y padre de sus cinco hijos fue el inventor de la escoba para alfombras en 1876 y ella se dedicaba a venderla de pueblo en pueblo de su Estados Unidos natal. Sin embargo, la pérdida de Melville hizo que todo cambiase para ella.
A partir de 1889, Anna Bissell se convierte en la directora ejecutiva de la compañía de productos de limpieza Bissell, la primera en Estados Unidos y de la historia. Todo un reto profesional que además tuvo que compaginar con su faceta de madre de cinco hijos cuando tenía 43 años. A pesar de esas circunstancias, consiguió situar a las escobas que llevan su nombre en el panorama internacional.
LA REINA VICTORIA DECRETÓ QUE TENÍA QUE USARSE SUS PRODUCTOS EN LOS PALACIOS
Su impacto fue de tal calibre que, en la última década del siglo XIX, consiguió la autorización de la monarquía inglesa para suministrar de escobas a la reina Victoria, quien además decretó que todos los palacios reales tenían que limpiarse con escobas Bissell cada semana. Con todo ello, convirtió a esta compañía en la más grande del mundo de su sector.
Durante su etapa, estableció políticas laborales como la compensación hacia los trabajadores o los planes de pensiones que, más tarde, se generalizaron en la sociedad. De ella se decía que “estudiaba los negocios de la misma manera que otras mujeres de su tiempo estudiaban francés”. Tras su fallecimiento en 1934, dejó un legado que se mantiene con los innovadores productos que la empresa que ella impulsó lanzó y sigue lanzando al mercado y que hace todo más fácil a la gente en sus casas.
