Los hombres mostraron más disponibilidad laboral que las mujeres, mientras que ellas asumieron más cargas.
La crisis sanitaria vino acompañada del teletrabajo forzado en muchísimos perfiles, y muchas empresas han optado por este modelo para seguir desarrollando su actividad en estos meses.
En este tiempo, el Centro de Estudios Sociológicos sobre la Vida Cotidiana y el Trabajo del Departamento de Sociología de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) ha elaborado un estudio sobre cómo han recaído las tareas del hogar durante el confinamiento y la primera fase de desescalada.
El estudio ha arrojado que las desigualdades se han aumentado en este tiempo con las labores domésticas. En concreto, ha puesto sobre la mesa que los hombres mostraban una mayor disponibilidad laboral y las mujeres han sufrido más la doble disponibilidad.
Sara Moreno, responsable del estudio, ha destacado que el incremento del volumen de las labores que implicó el confinamiento “recayó sobre las mujeres, a la vez que se acentuó la segregación del trabajo doméstico, y los hombres se ocuparon, principalmente, de cocinar y comprar”. Además, ha querido poner en el foco en el problema que puede suponer no establecer unos límites en el teletrabajo porque pueden suponer una falsa solución a la conciliación. “Los resultados de nuestro estudio plantean los límites del teletrabajo para transformar las actitudes y comportamientos de las mujeres y los hombres dentro del ámbito doméstico, si no se acompaña de planes de igualdad específicos para superarlos”
Las entrevistas en profundidad realizadas para elaborar el estudio recogen también que estas desigualdades se acentúan o se corrigen más depende del tipo de puestos. En los perfiles técnicos, la tendencia ha sido mucho más igualitaria entre los hombres y las mujeres con hijos a su cargo. Mientras que en los puestos directivos estas diferencias se han ahondado.
El estudio ha contado con el apoyo del Fondo Supera Covid-19, creado por el Banco Santander a través de Santander Universidades, en colaboración con Cure Universidades Españolas y el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).