Su contribución a la seguridad vial, marcada por la implementación de las líneas separadoras, sigue siendo un testimonio duradero de cómo una idea innovadora puede cambiar significativamente la forma en que interactuamos con nuestras carreteras
June McCarroll (1867, Nueva York) fue una figura destacada en la historia, reconocida por su contribución significativa al diseño y la implementación de líneas separadoras en carreteras, una innovación crucial para la seguridad vial.
Su infancia estuvo marcada por la adversidad al perder a su madre a los cinco meses de edad. Los primeros años de June estuvieron marcados por la movilidad constante, ya que su padre se trasladaba con frecuencia de una ciudad a otra. No obstante, la familia finalmente se estableció en California, donde June dedicó sus esfuerzos a estudiar medicina.
Después de licenciarse, McCarroll se convirtió en enfermera y médica para la compañía de ferrocarriles Southern Pacific a principios del siglo XX. Fue la única médica que atendía regularmente en el desierto que se ubica entre el lago Salton y Palm Springs, así como la única doctora que atendía a las cinco reservas indias en la zona en nombre de la Oficina de Asuntos Indígenas. Una mujer comprometida con la sociedad y apasionada por la ciencia.
MEJORAR LA SEGURIDAD VIAL
El momento crucial en la vida de June McCarroll llegó en el otoño de 1917. Mientras conducía hacia su oficina en Indio, California, estuvo a punto de sufrir una colisión con un camión que se acercó demasiado a su vehículo. Este encuentro la llevó a idear una solución simple y efectiva: pintar una línea de color en el centro de la carretera para delimitar los carriles y mejorar la seguridad vial.
A pesar de la resistencia inicial de las autoridades, que le negaron el permiso para pintar las carreteras, June persistió y continuó defendiendo su idea. Su tenacidad y visión finalmente llevaron al Departamento de Transportes de California a adoptar su propuesta, iniciando así la práctica generalizada de pintar líneas blancas en las carreteras.
Su contribución a la seguridad vial, marcada por la implementación de las líneas separadoras, sigue siendo un testimonio duradero de cómo una idea innovadora puede cambiar significativamente la forma en que interactuamos con nuestras carreteras y, por ende, con el mundo que nos rodea. Su placa conmemorativa en Indio, California, destaca su papel pionero y su impacto duradero en la seguridad vial, honrando a una mujer visionaria y comprometida con la mejora de la sociedad.
