- En 2018 se les permitió conducir y ahora tienen la posibilidad de trabajar en la industria automotriz, pero bajo el consentimiento de su marido
Hace tan solo cuatro años, Arabia Saudita permitió que las mujeres pudieran sacarse el carnet de conducir. Ahora, las mujeres de este conservador país desafían sus viejas costumbres y empiezan a ejercer labores consideradas hasta entonces exclusivas de los hombres como la de ser mecánicas.
Esto se debe a que el país está comenzando a abrirse poco a poco a la modernidad, aunque todavía le queda bastante para igualarse con los países de occidente. Hace seis años, el príncipe heredero Mohamed Bin Salmán anunció un proyecto para modernizar el reino. Uno de los objetivos era introducir a más mujeres en el mercado laboral.
Esta oportunidad de introducirse en la industria automotriz es gracias a un taller de la ciudad de Yedá, donde forman a mujeres para que ejerzan como mecánicas y cuya principal labor es cambiar llantas, revisar el nivel del aceite y arreglar motores. Tienen la esperanza de que esta iniciativa anime a más mujeres a unirse a trabajar en esta industria. Sin embargo, para desempeñar está profesión es necesario contar con el consentimiento del marido.
Una visión más aperturista del reino
La integración de las mujeres en la esfera pública forma parte de la ‘Visión 2030’, una de las estrategias de la visión aperturista que el príncipe heredero para restaurar la controvertida imagen de Arabia Saudita.
Gracias a esto, en diciembre 2016 Mohamed Bin Salmán informó que modernizaría al país, en noviembre de 2017 legalizó la práctica del yoga en el reino, en 2018 se permitió que las sauditas pudieran conducir y a partir de agosto de 2019 las mujeres dejan de necesitar el permiso de un hombre de su familia para alquilar un apartamento, someterse a una operación o abrir una cuenta bancaria. Además, las mujeres de más de 21 años ya pueden solicitar un pasaporte sin permiso.
Se espera que para 2030 la integración de las sauditas sea más notoria, aunque a día de hoy, siguen existiendo muchos sectores conservadores que consideran que las mujeres no son aptas para cualquier profesión u oficio. No cabe duda de que en Arabia Saudita queda un largo camino por recorrer para que la mujer esté en igualdad de oportunidades y goce de los mismos derechos que el hombre.