Así lo asegura el informe Global Findex 2021: Women’s World Banking Response, que demuestra que queda un largo camino en la igualdad de género en este ámbito.
La igualdad de género es una tarea pendiente en el mundo a la hora de acceder a los servicios financieros, así lo indica el informe Global Findex 2021: Women’s World Banking Response, al señalar que un total de 742 millones de mujeres en el planeta carecen de accesibilidad a estos derechos. Una cantidad que, como muestran desde este estudio, equivale a la población que podría tener el tercer país más grande del universo, tan solo por detrás de India y China.
No obstante, la brecha en este sentido se ha reducido durante los últimos diez años, de manera que se ha pasado de un 9 a un 6 % en lo que respecta a la titularidad de cuentas en los mercados emergentes, aunque también hay países en los que ha aumentado esta diferencia.
LA DIGITALIZACIÓN, FACTOR CLAVE PARA REDUCIR LA BRECHA EN MUCHOS PAÍSES
La reducción comentada se debe, en gran parte, a la digitalización que derivó de la pandemia, de forma que, durante los confinamientos, el pago de los gobiernos a los ciudadanos permitió a las mujeres tener las mismas posibilidades que los hombres de abrirse una cuenta bancaria para realizar y recibir pagos digitales. Esto supuso un primer paso para usar con frecuencia una cuenta y crear una huella digital para acceder a un crédito, según asegura el Banco Mundial.
Por contra, los avances se han ralentizado e incluso retrocedido tras el fin de las restricciones y la vuelta a la normalidad. Para ser más exactos, el desigual acceso a la tecnología provocó que la brecha creciese en tres puntos porcentuales durante el año pasado, alcanzando el 18 %, y que supuso que hubiese 315 millones menos de mujeres con un teléfono móvil que hombres. Asimismo, el acceso a Internet de las féminas también sufrió un estancamiento, ya que tuvieron un 16 % menos de probabilidades de emplear esta tecnología que los hombres, en comparación con el 15 % del año anterior.